Los artistas muchas veces se inspiran en los lugares donde viven o viajan, desde paisajes rurales hasta ciudades ruidosas. Algunos pintan lugares familiares cercanos a su hogar y otros se sienten atraídos por tierras lejanas.
Rembrandt van Rijn a menudo dibujaba el paisaje de Holanda porque en ese país nació. Canaletto se hizo famoso por las pinturas que hizo de Venecia, que vendió como recuerdos a los turistas visitantes. Jasper Francis Cropsey pintó el valle del río Hudson, particularmente su colorido otoño, mientras que Thomas Moran y George Catlin exploraron el oeste americano.

Henri Matisse y André Derain pasaron un tiempo en el sur de Francia, experimentando formas de capturar la espectacular luz de esa región. George Bellows fue cautivado por la energía de una ciudad en crecimiento: Nueva York.


Ahora es tu turno: ¿Qué lugar que conozcas, que veas por tu ventana, o al que hayas viajado te puede servir como punto de inspiración para pintar? Luego de pensar cuál es el lugar en el mundo que elegiste, te propongo dibujarlo y pintarlo. Cuando esté listo, enviame si es posible, una imagen, por Acadeu.